Requisitos para que se efectúe el proceso de expropiación
Una expropiación forzosa es un procedimiento legal en el que una autoridad toma posesión de una propiedad privada a cambio de una compensación justa para el propietario. El proceso de expropiación está regulado por ley y se lleva a cabo tras un proceso de evaluación y negociación entre la autoridad y la persona afectada.
En dicho proceso, es necesaria la presencia de una serie de requisitos, tanto personales como reales, para que la expropiación se pueda considerar justa y legal. La compensación económica que se ofrece al propietario, por ejemplo, debe ser adecuada al valor de la propiedad expropiada.
Requisitos personales
Tres son los requisitos personales que deben incurrir en todo proceso de expropiación:
- El expropiado.
- La Administración expropiante.
- El beneficiario de la expropiación forzosa.
El expropiado, en primer lugar, deberá demostrar que la propiedad que se desea expropiar es suya. Por su parte, la Administración ha de iniciar el procedimiento de expropiación forzosa ciñéndose en todo momento a lo que dictamina la ley en estos casos. Finalmente, el beneficiario tendrá que demostrar la necesidad de realizar este proceso y justificar que su resultado va a suponer un bien de interés público.
Requisitos reales
Dentro de los requisitos reales del proceso de expropiación, también nos encontramos con tres apartados fundamentales: el requisito del pago, el acta de ocupación y las modificaciones patrimoniales.
El requisito de pago
El pago o justiprecio de la expropiación forzosa ha de materializarse de forma previa a la ocupación. Para establecer el pago, las partes implicadas pueden llegar a un acuerdo en el mismo. De no ser así, el Jurado Provincial de Expropiación Forzosa será la autoridad que, a la vista de las hojas de aprecio presentadas por la Administración y el expropiado, decida la cantidad del pago.
Si el expropiado no está de acuerdo con la cantidad del pago que estipule el Jurado Provincial, puede enviar un recurso a los tribunales.
El acta de ocupación
El acta de ocupación es un documento que tiene como objetivo hacer constar que la propiedad ha sido tomada por la Administración y que el propietario ha perdido el uso y disfrute de la misma. En el acta, se detallan las características del bien expropiado, así como la fecha y la forma en la que se ha producido la ocupación.
También se establece la cuantía de la indemnización que se debe pagar al propietario por la expropiación.
Modificaciones patrimoniales
Por último, las modificaciones patrimoniales son las encargadas de demostrar que la Administración es ya la legítima propietario del bien expropiado. Hablamos aquí de un contrato de carácter civil con la firma de todas las partes y que se incluye en el Registro de la Propiedad y el Catastro.
Será este el último paso para dar por concluido el proceso de expropiación forzosa.
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